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Los participantes de “San Juan Bautista”, expertos en piezas de madera, lana y tela
La comunidad de Pongo K’asa, del Municipio de Tocopaya, está ubicada a 4.002 m.s.n.m. en el Km 94, carretera troncal Cochabamba- Oruro, cuenta con alrededor de 120 familias y un importante Centro de Educación Alternativa “San Juan Bautista”, que atiende a cinco municipios.
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- Formación técnica profesional
El Centro, según datos brindados por el director académico, Anacleto Gerónimo, ofrece los niveles de Educación Primaria de Adultos (EPA), Educación Secundaria de Adultos (ESA) y Educación Técnica de Adultos (ETA), esta última con talleres equipados para implementar procesos de formación técnica, tecnológica y productiva.
En el área de formación técnica se ofrecen cinco carreras: Tejido Artesanal, Agropecuaria, Sistemas Computacionales, Tallado en Madera, y Corte y Confección, que son apoyadas por el Proyecto formación técnica profesional de la Cooperación Suiza en Bolivia con la dotación de insumos, equipamiento y apoyo a la cualificación docente e innovación en formación con producción.
La mayoría de los participantes se encuentran entre 15 a 30 años o más. Esta población en su mayoría pertenece a la región andina del Departamento de Cochabamba.
Estos dos últimos años, explica Anacleto Gerónimo, “Hemos tenido la oportunidad de salir a otras comunidades: Challa Grande, Gabini, Japo, Achacota, lugares donde los docentes también brindan formación técnica gracias a la Cooperación Suiza”.
Una de las potencialidades del Centro es contar con los recursos humanos profesionales y de especialidad en todas las áreas, tanto para materias humanísticas, como también para la parte técnica para una probación trilingüe: quechua, castellano y aymara.
En las últimas gestiones el Centro capacita a los participantes para que puedan iniciar sus propios emprendimientos que contribuyen a los ingresos familiares y el desarrollo de sus comunidades. Algunos ejemplos destacados, según los mismos participantes, se dieron en el área de costura donde algunas personas se animaron a abrir sus propios talleres para refaccionar y confeccionar ropa en sus comunidades.
Una de las estudiantes confiesa que se sentía sin las habilidades necesarias para hacer este trabajo, pero que ahora descubrió que puede y que es reconocida por el buen trabajo que realiza en el área de costura.
La semana pasada el Embajador de Suiza en Bolivia, Peter Bischof, visitó el Centro y destacó que la calidad que está logrando este Centro en la oferta de productos en carpintería y tejido, pero también en el acceso de alumnos a carreras que tradicionalmente eran consideradas sólo una opción para mujeres.
El docente de carpintería mostró algunas obras que sus participantes realizaron y destacó que la misma comunidad también ya les hace algunos pedidos, situación se da en otras carreras.