“Estoy comprometido a financiar algún emprendimiento”

Marcelo Vladimir Molina cuenta que cuando era más joven se quedó “atrás” porque él no había podido obtener ninguna profesión como lo hicieron sus hermanos. Sin embargo, con el paso del tiempo y con ánimos de lograr un buen futuro,  se propuso aprender corte y confección en CETHA Caracollo de Oruro.

“Aprendí cómo hacer patronajes, costurar ropa deportiva, camisas, chamarras, y ahora estoy aprendiendo sobre sastrería”, expresa agradecido a tiempo de explicar que su deseo es alcanzar nuevas metas.  La experiencia lograda en estos años le permitió confeccionar chalecos para la Facultad Técnica de Oruro, el Club de Leones y el magisterio, entre sus más destacados clientes.

Cumplió en la entrega de sus obras gracias a las nuevas y modernas maquinas que adquirió con el capital semilla que le brindó el proyecto Formación técnica profesional, a través de la Comisión Episcopal de Educación. Con este capital compró una máquina collarete, una plancha industrial, una overlock, una recta y una cortadora de hoja de 10 pulgadas. “El emprendimiento que ahora tengo me ha permitido cumplir con trabajos muy exigentes, y de mayor calidad”, dice.

Con la fortuna de trabajar en su casa, disponer de su tiempo y cumplir con las tareas de ser un buen padre, Marcelo indica que se hizo una promesa a sí mismo, la de financiar algún emprendimiento de algún joven que participe en el CETHA Caracollo como símbolo de reciprocidad y cariño que le tiene a este Centro.