La Escuela Taller Municipal, una oportunidad para jóvenes de diversos barrios paceños

“En La Paz es alto el desempleo en jóvenes por falta de experiencia, conocimientos y  capacitación en universidades e institutos. Jóvenes pertenecientes a familias de escasos recursos difícilmente tienen oportunidades para mejorar su situación económica y la de sus familias, son muy pocos quienes ven una oportunidad -en medio de un conflicto al que se enfrentan- y aprovechan la primera oportunidad que se les brinda”, aseguró Gustavo Ríos, Coordinador de la Escuela Taller Municipal.

Cecilia Rita de Bonadona, Directora de Competitividad y Emprendimiento  del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz informó que “La Paz cuenta con una variedad de institutos técnicos que capacitan a jóvenes en general, sin embargo los costos de estudio se asemejan al que tendrían de estudiar en una universidad, por lo tanto todavía estos jóvenes que buscan oportunidades de vida se ven en el mismo conflicto inicial por falta económica”. Algunos con esfuerzo culminan un estudio universitario en la Universidad pública, sin embargo encontrar una fuente laboral al concluir es otro reto al que deberán enfrentar, añadió.

“Esta situación fue la que llevó al Gobierno Autónomo Municipal con el financiamiento de la Cooperación Suiza en Bolivia, a dar inicio a la Escuela Taller Municipal (ETM) el año 2014”, explicó Ríos y añadió que la ETM permite capacitar de manera gratuita a jóvenes de 17 a 35 años de edad en los rubros de electricidad, electromecánica y metalmecánica, dándoles la posibilidad de ser insertados laboralmente en una empresa.

La ETM “se encuentra en dos casas comunales Alto Pasankeri con los rubros de electricidad y electromecánica; y en Alto Tacagua con metalmecánica, lugar donde nuestros beneficiarios llegan con mucho entusiasmo a aprender lo que les ayudará a encontrar una fuente laboral o a iniciar su propio emprendimiento”, aseguró Angélica Mamani, Técnico de la Unidad de Fortalecimiento Productivo.

Desde el año 2014 la ETM logró capacitar a 373 personas de las cuales 206 fueron insertados en espacios laborales.  Entre éstos jóvenes hay varios que hacen el esfuerzo por llegar a las capacitaciones recorriendo grandes distancias de extremo a otro en la ciudad, situación que nos hace pensar en la necesidad de estos espacios en otros barrios de la ciudad.

Uno de los casos es de Ronald Perez de 25 años de edad, quien vive con su madre y un hermano menor a quien ayuda con sus estudios, motivo por el cual se dedicó a trabajar como guardia de seguridad en una discoteca de la ciudad de El Alto. Este joven con ganas de superarse nos comenta que viaja desde Villa Adela para llegar a las capacitaciones  que ofrece la ETM “tomo un bus a la ceja y de ahí me voy caminando a Pasankeri”, explica y añade  que “cuando  uno quiere  todo se puede”.

Por su parte Amelia Ramos, de 35 años de edad, quien vive en Alto Lima -altura tercera sección de Ballivián en la ciudad de El Alto- comenta que aún con la distancia para ella es importante capacitarse para lograr una mejor estabilidad laboral siendo que hoy en día ella trabaja como ayudante de cocina y gana lo suficiente para los gastos del día.

“Detrás de cada persona capacitada se encuentra un mundo de problemas, dificultades y sobre todo las ganas para salir adelante, es por esto que optan por esta alternativa”, comenta Rios.